Sobre nosotros
Nuestra historia se remonta a la década de los años 30 en la que nuestros abuelos secaban los jamones en las pequeñas bodegas de sus casas. Poco a poco la demanda fue creciendo y entonces hubo que plantearse el trasladarse y construir lo que hoy en día es nuestra fabrica. Al principio solo curábamos jamones, pero a petición de los clientes comenzamos a fabricar diversos tipos de embutidos. De esto ya hace mucho tiempo y hoy son ya mas de 70 años desde que comenzamos nuestra andadura, aunque ahora con mejores "artilugios", lo que ofrece unas mayores garantías sanitarias.
Pero hay algo que no ha cambiado, el buen hacer, la profesionalidad y el cariño que, como nuestros abuelos, nosotros ponemos a la hora de elaborar nuestros productos.
Seleccionamos los mejores cerdos ibéricos de las dehesas extremeñas -para nuestra producción de ibéricos- y los más grasos para nuestra producción de blanco.
Todas nuestras piezas de jamones son curadas en secaderos naturales, y su tiempo de curación oscila entre 14 y 18 meses para los jamones blancos de Bodega Reserva, para los ibéricos de recebo entre 24 y 30 y para los exquisitos jamones de bellota a partir de 30 meses.
Nuestros embutidos, hechos en sarta, son de tradición artesanal y casera. Este tipo de embutidos requiere un cuidado muy especial en la selección de las carnes y una elección muy minuciosa de los ingredientes. Para ello contamos en todos los pimentonados con el magnifico pimentón de la Vera. El tiempo de curación es de unos 30 días para los chorizos rojos serranos y 35 para los chorizos blancos serranos. Para los ibéricos oscilan entre 40 y 45 días.
Los lomos se caracterizan por su esmerada fabricación, en su tripa echamos lo que aquí denominamos "la pringue"; una grasa condimentada que tiene la función de imprimirle al lomo un paladar mucho más jugoso.
Todos nuestros embutidos son presentados envasados al vacío, de esta manera se protege al producto y se evitan sus mermas, conservando su sabor íntegro.